Hay muchos tipos de libros: libros de historia, libros de terror, libros de amor… Sin embargo, existen otros más profundos, aquellos que te llevan a pensar acerca del sentido de la vida, que te ayudan a madurar como persona. Son libros que entretienen y, al mismo tiempo, te dan lecciones. No soy un robot es, precisamente, eso. Un compendio indispensable, una enseñanza vital, una amonestación al egoísmo, una oda a la existencia y un ejemplo de valentía. Carlos Sanz relata su difícil trayectoria con el único objetivo de hacernos ver más allá y de comprender el milagro de lo más preciado que tenemos.

Un balón, un seminario, el 10, un silbato, un pueblo, una cicatriz y un corazón. La suerte me permite ser un relator de una historia que nos hace ver que el ser humano es capaz de hacer frente a cuantas dificultades aparecen en el día a día. Me siento afortunado de haber podido vivir experiencias al límite y, lo que es más importante, tener una sensación de resistencia infinita, pero no diferente a la del resto de los mortales. La generosidad, la voluntad y la ciencia han conseguido que mi vida siga teniendo sentido. Cada vez que retrocede mi pensamiento a un treinta de octubre de hace muchos años, soy consciente de que el destino me ha dado una segunda oportunidad. Un cuerpo puzle que no llega a ser un robot.

El protagonista ha superado cuatro trasplantes de hígado, ha sido campeón del mundo de atletismo y natación para trasplantados, fundador y creador de la Asociación de Enfermos y Trasplantados Hepáticos de Aragón, Presidente de la Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos (FNETH) y ha creado la FUNDACION CARLOS SANZ, cuyo objetivo primordial es la difusión de la necesidad de la donación de órganos para salvar vidas.

El libro es muy interesante y cuenta la vida del deportista y su ejemplo de vida y superación. Se incluyen numerosas colaboraciones de quienes han vivido de cerca la gesta heroica de este campeón. Entre las colaboraciones destaca la aportada por uno de los Patronos de la Fundación, José Antonio Visús Apellániz, que bajo el título «Una lección solidaria» relata los momentos dramáticos vividos por el protagonista en los días previos al primer trasplante y, cuando ya, muy pocos apostaban por su vida. El protagonista sorprendió a todos superando la difícil situación vivida y, hoy, nos vuelve a sorprender con este libro que, a buen seguro, a nadie dejará indiferente. Desde la Fundación Carlos Sanz les invitamos a participar en su lectura. Les animará a seguir adelante en sus peores momentos.